Período de adaptación

Para el niño o la niña, la entrada en la escuela supone un cambio muy importante. Sale de su círculo familiar, que le resulta seguro y conocido y entra en la escuela, un lugar nuevo y en el que va a ampliar sus relaciones.

La dificultad que implica este cambio es la separación mutua del niño o niña y la familia, y la forma en que lo resuelva va a incidir en el proceso de socialización y en la actitud hacia el aprendizaje.

Por esto consideramos de gran importancia  este primer periodo de contacto de la niña y el niño con la escuela, al que  llamamos periodo de adaptación.

¿QUÉ ES EL PERÍODO DE ADAPTACIÓN? Es el tiempo que la niña o el niño tarda en familiarizarse social y afectivamente con un medio nuevo: profesorado, compañeros, compañeras y espacios escolares.

La finalidad de este periodo es:

  • Que los niños y niñas conozcan el centro, los compañeros y compañeras y al profesorado  en un clima tranquilo, agradable y de respeto.
  • Que conozcan las normas del Centro, de clase y vayan adquiriendo distintos hábitos, (higiene, orden, trabajo…).
  • Cuanto mayor sea la relación entre la familia y la escuela, más posibilidades habrá para una adecuada adaptación de las niñas y los niños.

¿QUIÉN SE ADAPTA?   En este proceso no sólo se adapta el niño o la niña, sino también los padres y madres, sobre todo el que más tiempo ha permanecido con él/ella, junto con el profesorado.

Las reacciones de los niños y niñas pueden ser diversas a lo largo de este periodo: lloros, rabietas, pesadillas, regresiones, agresividad, normalidad… Son expresiones de sus sentimientos ante la nueva situación.

Todos (padres, madres, profesorado) conocen las dificultades de este momento, pero esta experiencia constituye una conquista adaptativa y va a ser motivo de crecimiento personal. Por ello debemos  acompañar y ayudar  al niño o niña a superarse  hasta conseguir su adaptación  al Centro.

La conducta de las familias es muy importante en este periodo. El niño y la niña debe captar seguridad y confianza en la familia cuando lo dejan en la Escuela y no ansiedad, ya que ellos lo van a notar y se va a dificultar este proceso de adaptación.    Sería interesante que las familias:

  •  Familiarizaran al niño o niña con el colegio.
  •  Participaran en reuniones, entrevistas y actividades del colegio.
  •  Escucharan sus anécdotas o necesidades.
  •  No aceptaran nunca la rabieta como instrumento para no ir al colegio.
  •  Hablaran de la escuela de forma positiva: ilusionar y entusiasmar al niño.
  • Controlaran los progresos adaptativos y las regresiones.
  •  Buscaran apoyo en los profesores siempre que lo necesiten.

A todo el profesorado implicado en este periodo nos gustaría:

  • Compartir con los padres y madres la responsabilidad de la educación infantil.
  • Lograr la confianza de los niños y las niñas al llegar al aula.
  • Conocer la historia personal de la niña o el niño para llegar a un mejor entendimiento.
  • Ser el soporte psicoafectivo del niño o niña al separarse, durante un rato, de la familia.
  • Favorecer el conocimiento del Centro y la relación con las demás compañeras y compañeros y del profesorado.

¿QUÉ OBJETIVOS NOS PLANTEAMOS? Pretendemos conseguir un conocimiento mutuo entre partes implicadas: Padres-Niños/as-Escuela, en el que se establezca una relación de confianza que favorezca y facilite la incorporación de los niños y niñas al centro. Otros objetivos que pretendemos conseguir son:

  • Conseguir que las niñas y niños se habitúen a la ubicación del aula y demás dependencias del colegio y que se integren en la dinámica de su grupo.
  • Que se sientan acogidos como seres individuales.
  • Que los niños y niñas manifiesten sus emociones.
  • Conseguir que los niños y niñas estén contentos de reencontrarse con el grupo y la educadora.
  • Que sean capaces de aceptar la separación y la despedida de la persona que les acompaña.
  • Que todas las madres y padres se vayan tranquilos y depositen su confianza en la escuela.

¿INFLUYE EN LA ADAPTACIÓN DE LOS NIÑOS Y NIÑAS EL COMO LO VIVE SU FAMILIA? Los padres tienen una influencia en este momento que viene determinada por cómo ellos vivan la separación: sus temores, sus expectativas, su ansiedad. su angustia, su seguridad o inseguridad, su grado de confianza en la escuela y en las posibilidades de su hijo/a. Todo esto es transmitido y captado por el niño/a. Así si la madre vive con dificultad este momento el niño va a reclamarla con ansiedad y va a vivir la adaptación con inseguridad y miedos.

Cada niño/a lo exterioriza y expresa de diversas formas, pero todos ellos necesitan ayuda por parte de sus padres y maestros. Es posible que los niños/as lloren, pataleen, intenten escaparse, peguen al adulto e incluso a los niños o niñas, no quieran comer, se niegan a dormir e incluso puede aparecer de nuevo el volver a hacerse pis. Todo esto va encaminado a mostrar su rechazo llamando constantemente la atención de los adultos. En definitiva todos pasarán por un periodo de adaptación más o menos largo hasta que recobre la seguridad en sí mismo y la confianza.

¿QUÉ ACTIVIDADES LLEVAREMOS A CABO EN EL AULA QUE FAVOREZCAN LA ADAPTACIÓN DE LOS NIÑOS/AS EN ESTE PERIODO? Con la expresión musical conocemos las necesidades, características y peculiaridades de cada niño/a, respetamos los distintos ritmos, los integramos en el grupo-clase desarrollando su autonomía, establecemos una relación de confianza-seguridad entre familia y escuela…

Las canciones, los juegos, las actividades, los cuentos musicales… que desarrollamos en el aula les ayudan a aprenderse el nombre de la maestra y de sus compañeros/as, reconocerse como parte integrante del grupo-clase, conocer el aula, moverse libremente por ella utilizando objetos y materiales, familiarizándose con ellos, conocer a los demás niños y niñas y trabajadores del centro y expresar sus propios sentimientos hacia la escuela.

¿CUÁNDO PODEMOS DAR POR FINALIZADO EL PERIODO DE ADAPTACIÓN? Este periodo se puede dar por terminado cuando:

  •   El niño quiere ir al Colegio.
  •  Se relaciona con la profesora y otros adultos/as del Centro.
  •  Juega con sus compañeros y compañeras.
  •  Expresa sus deseos.
  •  Poco a poco va utilizando las cosas de su clase y del Centro.
  •  No manifiesta conflicto ni en la vida familiar ni en la escolar.
  •  Se le ve alegre y tranquilo/a.

Entre todos y todas debemos ayudar a nuestr@s pequeñ@s a que inicien bien la escolarización, y lo más importante de todo, que vengan, FELICES  al colegio.

Lo más importante es mantener la calma.

Si a los padres nos cuesta volver al trabajo y adaptarnos a la nueva situación,

¿por qué con los niños y niñas iba a ser diferente?