Se acerca diciembre, el invierno y la navidad. Estos días nos han estado acompañando las nieblas y el frío, y ya apetecía un almuerzo calentito para poder calentarnos las manos.
En los pasillos ya se olía a castañas desde bien temprano así que a la hora del recreo hemos hecho nuestros cucuruchos y hemos bajado a recoger nuestras castañas para poder comerlas en el patio.
¡Estaban riquísimas!.
¡Muchas gracias a todas las familias que han colaborado y de una forma especial a nuestro castañero particular!